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"Cómo no ordenar", por @Kireinatatemono



Vino LA PIONERA @Kireinatatemono, autora del BLOG PIONERO "We can build you" y nos canta cuántos pares son tres botas en cuestiones de orden del placard. PIONERA, PIONERO.
Quiero decir que sus consejos son reveladores y novedosos para mí porque yo HAGO TODO LO CONTRARIO, es decir oscilo entre desorden horrendo y ataques de limpieza y tiro todo en la cama y estoy hasta las 4 am ordenando porque ante todo #bipolar.
Los dejo con la pluma maestra y GRACIAS MARIE por estar en Internet <3 <3 <3

"Tengo tres defectos:

a- soy desordenada
b- me gustan las cosas, las colecciones, los objetos de todo tipo, los libros, los cuadernos, los
frascos, lo antiguo, lo moderno, bueno, se hacen la idea
c- no me alcanza para tener personal doméstico 24/7 que mantenga a raya mi barroquismo.

Este dechado de no virtudes me ha hecho reflexionar largamente sobre el tema de cómo ordenar.
Y mi conclusión más importante es que puedo decir a ciencia cierta cómo NO se ordena.
Tomemos el ejemplo clásico de un placard lleno de ropa. ¿Qué NO hacer? Sacar absolutamente
TODO y tirarlo a la cama o al piso. Porque la vida moderna, ay, está llena de interrupciones,
tentaciones y fastidio y lo más probable es que no lleguemos a solucionar el tema de un solo tirón.
No me creen, ya sé, pero la próxima vez, prueben esto:
-vacíen un estante o cajón, SOLO UNO
-clasifiquen lo que haya adentro, decidan qué van a volver a guardar ahí y tiren lo inservible (otro
gran tema, para otro día)
-lo que sí sirve pero no va ahí, lo dejan apiladito en algún lado, ya separado según alguna categoría
que se les ocurra. Remeras de dormir, ropa color azul, pantalones de mirar series y comer helados,
bombachas de la suerte, cada cual se conoce.
-al rato, al día siguiente, como mucho a los dos días, agarran otro estante o cajón y repiten el
procedimiento
-eventualmente, todo hallará su lugar, se los prometo. En algún punto un estante quedará vacío para
recibir todas las remeras de ir al chino el domingo a las 2 antes que cierre.
-esto sirve para ordenar un placard en un día, dos, tres máximo, con todas las pausas que hagan
falta; más allá de eso empieza de vuelta la acumulación.

Desde ya, la única manera de mantener el orden conseguido es tratar de, después de cada lavado,
poner la ropa donde va y no en un bollo en una silla. Un poco todos los días evita un sábado entero
de frustración y odio.
No les voy a mentir: nunca logré ser ordenada, ni con este método ni con el otro pero años de
practicarlo me han hecho ver que este approach gradual y no totalitario contribuye a evitar UN
POCO esas conductas tan feas. Para mi, ordenada se nace. Yo te pongo un vaso en una mesa y ya te
lo apoyo desordenado.

Y algo más: el año pasado me enfermé fulero. Para una persona que dispone de pocas energías
diarias el enfoque A todo o nada es imposible, frustrante y desmoralizador. Capaz hoy me alcanza
para ordenar un estante o la caja de los crayones del nene o las carpetas de fotos en la computadora.
Siempre algo es algo. Si me propusiera hacer todo de una vez, perecería en el intento. En Unfuck
your habitat insisten mucho sobre este punto, en especial para la gente con alguna discapacidad o
enfermedad y, creo, tienen razón. Todo no se puede. Algo sí."

Antes y después, o después y antes en el vestidor de Marie:







Comentarios

  1. en realidad la foto del después es del antes, del antes de enfermarme mal. la del antes es la del después, la del ahora, que nadie toca un estante hace seis meses y me echaría a llorar al piso.
    la semana pasada ordené 4 estantes y 8 perchas y ahí quedé. cuando pueda retomo, ventajas del método gradual.
    tkm maruxa!

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    Respuestas
    1. Yo quiero un placard asi! Yo también soy desordenada y amo el coserío.

      Eliminar
  2. Voy a poner en práctica este consejo y después te cuento. MUA

    ResponderEliminar

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